Cuando una persona oye hablar del veganismo su cabeza suele irse en una de estas dos direcciones:
¿Cómo? ¿Vivir a base de verdura? ¡Qué locura!
o
Uff, eso es muy difícil. Son todo ingredientes caros, raros, e imposibles de encontrar.
Yo confieso que pase por los dos casos. Es que, realmente, si en una dieta quitamos la carne, el pescado, el marisco, los huevos y los lácteos, ¿qué nos queda? Frutas y verduras. Sí, básicamente es así. Pero no solo eso, una persona vegana se alimenta a base de frutas, hortalizas, legumbres, semillas y frutos secos.
Qué horror, ¿no?
Sí, yo también pensé así. Pero esta idea preconcebida la tenemos porque encasillamos a las verduras en ensaladas, las legumbres en potes y los frutos secos para acompañar a la cerveza.
Y es que esto es una soberana tontería. Porque con esta materia prima se pueden hacer maravillas.
¿Quieres hamburguesas? Pues se puede.
¿Algo que sustituya al queso? También.
¿Quieres algo que emule al huevo? Hecho.
¡La cocina vegana es super variada! Y yo, desde que he conocido este mundo, cocino mejor. Te lo digo de verdad. Ahora hago combinaciones de sabores que antes no se me hubieran ocurrido y aprovecho todo muchísimo más. No sé por qué, pero me ha sucedido así.
Antes de continuar déjame aclararte una cosa. La comida vegana no es cara, todo lo contrario, es mucho más barata que la cocina "tradicional". Y si no dime una cosa, cuando vas al super, ¿en qué departamento gastas más? Yo gastaba más en la carnicería, pescadería y charcutería. ¿Tú no?
Lo que más barato me salía era la frutería. Me hinchaba a comprar fruta, verdura, legumbres... y ¡15 euros! Me sentía como si estuviera atracando a la frutera. Pero es así.
¿Por qué la comida vegana se presupone cara?
Quizá sea porque la confundimos con la comida ecológica. Sí, está claro que lo normal sería que una persona vegana escogiera por conciencia la comida ecológica, pero es que no solo existen personas veganas por conciencia, si no que también existen personas veganas porque los ingredientes de origen animal le sientan mal.
Yo no compra comida ecológica. Por lo menos no toda, ni la mayoría siquiera. Compro en la frutería de mi barrio. Porque me gusta a apoyar al pequeño comercio y porque tiene buena relación calidad-precio.
¿Soy hipócrita?
No, simplemente no me puedo permitir la comida ecológica. Me encantaría pero no puedo. Es tres veces más cara que la otra y no puedo. Así que hipócrita o no, es lo que hay. Además compro a una frutera, por lo que la conciencia me queda tranquila aunque esté comiendo frutas y verduras cosechadas con pesticidas y mierdas.
Y del mismo modo comprendo a la gente que compra en las grandes superficies por lo mismo. Aunque, ¡ojo! asegúrate. La carne y el pescado sale mejor de precio en el super, pero la fruta, en mi caso, es más barata y de mejor calidad en la frutería, así que no des cosas por sentado.
Bien, dejando el tema de lo ecológico un poco de lado déjame decirte algo más. Yo ya no como carne. Probé el tofu y no me da mucho más por él. Así que lo cojo de vez en cuando porque se me antoja para hacer nuevas recetas. Pero ahora he encontrado otra alternativa a la carne. Y es la soja texturizada. Sí, tiene nombre raro, pero la puedes encontrar en la zona bio de las grandes superficies. Alcampo, Carrefour, Hipercor... Es un apaño de soja que se parece mucho a la carne picada. No en sabor, a mí en sabor me recuerda a los kikos, si no en textura y en forma de cocinarla. Bien, compré medio kilo de soja texturizada por 4'59 €. Pero no te creas que la soja texturizada cunde igual que la carne picada. No. Yo el otro día me hice para cenar unos calabacines rellenos y me sobró más de la mitad del relleno. ¿Y sabes cuánto gasté? ¡40 gr de soja texturizada! O sea que con 20 gr de soja cené y quedé como una bendita. Calcula ahora para cuanto tiempo me va a dar. Y lo mejor de todo es que como está deshidratada dura una eternidad.
¿Es caro?
No lo creo. Creo todo lo contrario. Si quieres un día te hago una relación con los productos que compro y el precio para que lo valores.
Pero de momento déjame enseñarte una receta para que veas que no todo son ingredientes raros. La receta que te traigo hoy me ha salvado la vida.
Yo antes era una adicta al queso y fue lo que más me costó eliminar de la dieta. Pero entonces encontré esta receta. Es de Danza de Fogones, un blog vegano que hace el paso al veganismo muchísimo más sencillo. Porque sus recetas apenas tienen "ingredientes raros". Se ha convertido en mi Biblia, Corán o como lo quieras llamar en mi paso a una dieta libre de ingredientes de origen animal.
El único "ingrediente raro" que vas a necesitar es levadura de cerveza. Que si lo piensas no es tan raro. A mí me lo daba mi madre cuando era peque de vez en cuando porque es muy bueno para el pelo, las uñas y la piel.
Vamos, que yo a esta receta le daba un 12 sobre 10. Me permite desterrar el queso y además incluye ingredientes buenos para el pelo, uñas y piel, cosa que a mí me viene genial.
¿Por qué lleva levadura de cerveza?
Porque la levadura de cerveza es lo que emula el sabor del queso. También puede hacerse con levadura nutricional. Aunque esta sí es un poco más "ingrediente raro" y tendrás que buscarla en herbolarios, mientras que la levadura de cerveza la encuentras también en hipermercados como los mencionados anteriormente y en el Mercadona.
Hasta ahora yo había usado levadura de cerveza, pero el otro día me hice con levadura nutricional porque tiene aún más beneficios. He comprado un cuarto de kilo de levadura nutricional por 6'60 €, pero te aseguro que cunde muchísimo. Porque esto es un ingrediente adicional a las recetas, no el principal como puede ser la soja texturizada.
Y dicho eso vamos allá. Te diré que yo soy una adicta al queso (aunque me estoy quitando) por lo que a mí, realmente a queso no me sabe, pero es una alternativa que está bueníma. Yo me hago la mitad de esta receta una vez a la semana y me da para desayunar toda la semana una tostada bien grande con "queso" en condiciones. Te digo esto para que veas realmente que cunde de verdad.
Ingredientes:
Notas.
- 360 gr de patata pelada.
- 135 gr de zanahoria pelada (si es ecológica no hace falta que la peles, sólo lávala bien).
- 70 gr de aceite de oliva virgen.
- 125 mililitros de agua (puedes pesar 125 gr).
- 1 cucharadita de sal.
- 1 cucharada de zumo de limón.
- 35 gr de levadura de cerveza.
- ½ cucharadita de ajo en polvo.
- ½ cucharadita de cebolla en polvo.
- 1 guindilla o cayena (opcional).
Elaboración:
- Pela y pica la patata y la zanahoria y córtala en cubos regulares. Cubre de agua y pon a hervir.
- Cuécelas durante 20 minutos o hasta que estén tiernas.
- Una vez tiernas, retira el agua y echa las hortalizas en un bol apto para meter la batidora.
- Echa el resto de ingredientes y bate hasta tener una mezcla homogénea y cremosa.
Notas.
- Si quieres el toque picante de la guindilla pero te da miedo, echa tan sólo una punta de guindilla sin pepitas.
- Puedes usar levadura de cerveza o levadura nutricional.
- Es imprescindible el uso de la batidora para este resultado. El batir la mezcla es lo que hace que quede con textura cremosa. Con el triturado se libera el almidón y la mezcla se vuelve elástica. Es por eso que los purés de patata se hacen con pasapurés, para evitar esa elasticidad. Pero en este caso es lo que queremos, para emular la elasticidad del queso crema.
- Con esta receta también puedes dar el toque ñoño para San Valentín. Tal cual hacíamos con el queso normal, pero sin el calentón del microondas.
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3 comentarios
Donde puedo comprar levadura de cerveza.? En mi localidad soy hay día y mercadona
ResponderEliminarBuenas noches Cristina!
ResponderEliminarEn Mercadona tienes. En el Día no lo sé. Pero en Mercadona normalmente (por lo menos en el de aquí) está en el apartado de perfumería, donde tienen los suplementos y pastillas para la piel, celulitis... Es una lata alta de color anaranjado si no recuerdo mal que pone levadura de cerveza.
Un abrazo.
Gracias me lo han traído de hipercor es como unas lacas cuando lo haga os cuento
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